Andy Warhol fue uno de los artistas más revolucionarios del siglo XX. Su gran talento radicaba en entender como nadie el mundo del pop, creando icónicas obras inspiradas en imágenes de figuras del momento, y eternas, como Marylin Monroe y Prince.
Precisamente, fue una fotografía del cantante de “Purple Rain”, lo que enfrento a los herederos de Andy Warhol con la fotógrafa Lynn Goldsmith, quien reclamaba los derechos por una fotografía que ella tomó, y que el artista plástico usó en una de sus famosas creaciones.
Todo surgió a partir de una publicación de la revista Vanity Fair, del año 2016, donde se utilizó una serigrafía de Andy Warhol, creada a partir de una foto de Lynn Goldsmith. El asunto, es que la fundación del fallecido artista recibió su pago por el uso de los derechos, pero la fotógrafa no.
Una disputa que trajo polémica
La Corte Suprema de los Estados Unidos falló a favor de la fotógrafa, que ahora deberá cobrar lo que le corresponde. La jueza de la Corte Sonia Sotomayor explicó que "el trabajo original de Goldsmith, al igual que el de otros fotógrafos, está protegido por los derechos de autor, incluso frente a artistas famosos".
"Incluso frente a artistas famosos".
La Fundación Andy Warhol para las Artes Visuales había recibido 10 mil dólares por el uso de la nueva imagen, en la edición especial de Vanity Fair, publicada en el año 2016, en homenaje al fallecido músico Prince.
Un tribunal de distrito había fallado tiempo atrás en favor de la Fundación de Andy Warhol, sin embargo, una corte de apelaciones dio marcha atrás decisión. Ahora, la Corte Suprema norteamericana emite un fallo, que muchos artistas temen que se convierta en referencia a futuro, y tenga un impacto artístico negativo.