El Papa Francisco llegó a la iglesia Católica para dar un drástico giro. Desde su llegada al Vaticano sus gestos y actitudes han sorprendido al mundo, y lo siguen haciendo hasta el día de hoy. Esta vez, contó el intercambio que tuvo con una mujer, quien le pidió que bendiga a su perro.
Ya hace un tiempo atrás, el Papa Francisco había criticado a las personas que prefieren adoptar y criar a un perro como si fuera un hijo, en lugar de darle cobijo a un niño de tantos huérfanos que hay en el mundo. La situación volvió a repetirse y el santo padre demostró que se mantiene firme en sus convicciones.
En su participación en el foro de la tercera edición de “Los Estados Generales de la Natalidad”, el Papa Francisco contó que no pudo contenerse y retó a una fiel, que sobreprotegía a su mascota, y le pidió incluso que le diera su bendición.
“Creo que el tema de la natalidad es central para todos, especialmente para el futuro de Italia y Europa”, sostuvo en su intervención el Papa Francisco, durante la conferencia de la que participó también la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni.
"Perrhijos" no
“Hace dos semanas, mi secretario estaba en la Plaza y se acercó una madre con un cochecito. Él, un tierno sacerdote, se acercó para bendecir al bebé”, pero el religioso se dio una gran sorpresa al ver que “era un perrito”, contó el santo padre. Pero después hubo otro episodio.
"Regañé a la señora".
“Hace quince días, en la Audiencia General del miércoles, estaba saludando a una señora de unos cincuenta años, como yo, más o menos. Ella abrió su bolso y dijo: ‘¿Podría bendecir a mi bebé?’, ¡Era un perrito!”, dijo indignado el Papa Francisco. “Perdí la paciencia y regañé a la señora”, reconoció. “Señora, muchos niños tienen hambre y usted tiene un perro”, asegura que le dijo.