Todos los interesados en la jardinería llegan a tener el deseo de contar con muchas especies dentro de su jardín. En este caso, te contaremos una forma sencilla de tener una de las plantas más reconocidas: la manzanilla. Se trata de un proceso muy fácil, en el que utilizaremos solo un saquito de té.
Con esto, podrás ahorrar dinero y evitarás ir hasta un vivero a conseguir la planta. Solo deberás seguir una serie de sencillos pasos y tener a mano un saquito de té de manzanilla. Este producto es muy común en el hogar, ya que es uno de sabores más elegidos a la hora de ir al supermercado.
Lo primero que haremos es conseguir una maceta, con su tierra y sustrato dentro. Una vez que tengas esto listo, vas a verter el contenido de un saquito de té de esta hierba y lo vas a dejar ahí. No hará falta remover la tierra ni enterrar el contenido.
Asimismo, una vez que el contenido del saquito, con sus respectivas semillas, queden arriba de la tierra, vas a proceder a regar con agua. Cuando termines este paso, tendrás que tapar la maceta con algo transparente para que haga de invernadero y en unos días vas a poder ver cómo la manzanilla comienza a germinar.
Tendrás que tapar la maceta con algo transparente para que haga de invernadero.
Recomendación para trasplantar tu planta
Notarás que después de unas semanas, la manzanilla comenzará a crecer y ahí es momento de trasplantarla, si eso es lo que quieres. Para ello, deberás sacarla de la maceta con mucho cuidado y elegir un lugar en tu jardín o en el fondo, donde tendrá más espacio para crecer.
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