Emilia Daiber es uno de los principales rostros de Chilevisión. Durante el verano fue la conductora de la tercera temporada de “El discípulo del chef”, que terminó ganando Karen Bejarano. De momento, se encuentra de viaje por Europa, con otro proyecto laboral, que al mismo tiempo sirve de vacaciones familiares.
Y es que ante todo, Emilia Daiber es una mujer de familia, entonces junto a su esposo, Axel Reichhard, y su hijo Baltazar, armaron las valijas y cruzaron el Atlántico rumbo al viejo continente. Según dijo, se trata de un viaje de trabajo, junto a Paramount Global, pero todavía no trascendieron mayores detalles sobre qué trae entre manos.
Lo cierto es que el primer destino de la familia fue Italia, comenzando por los famosos canales de Venecia. Desde allí, siguieron recorriendo cada rincónde uno de los países con los paisajes más bellos del mundo, y con las comidas más deliciosas.
"Historia, estímulos y encuentros en este sueño cosmopolita".
Días atrás, Emilia Daiber y su marido llegaron por fin a Roma, y lo coronaron con una fotografía en frente del mismísimo Coliseo. "Roma con mi Axel Reichhard. Una ciudad inaudita, majestuosa, sobrecogedora, derruida y, al mismo tiempo, viva. Historia, estímulos y encuentros en este sueño cosmopolita", escribió en su cuenta de Instagram.
También recorrieron otros sitios famosos, como la Fontana di Trevi. Antes habían estado por la ciudad de Florencia, donde el pequeño disfrutó de un “gelato”, y luego visitaron un museo. Quedando todo registrado en las redes sociales de la animadora.
Un nuevo destino
Ahora, Emilia Daiber comenzó una nueva etapa en esta aventura familiar, como se pudo ver en su cuenta de Instagram, pues han desembarcado en una de las ciudades más glamorosas e históricas como lo es Paris. Los recibió una banda callejera tocando algunos ritmos típicos de la capital francesa.
“Emily in París”, fue la síntesis perfecta de la animadora, que se fotografió frente a un café típico, demostrando que ella también le puede aportar el estilo y el glamour para pasar como una parisina más.